What is a Balanced Diet for Nursing Moms?
En nuestra serie de artículos, en la cual la ayudamos a optar por las mejores opciones como mamá lactante, hoy nos enfocaremos en la dieta.
Recuerde, una mujer que no sigue una dieta estrictamente "nutritiva" puede amamantar con éxito. Comer bien, es decir, comer una dieta equilibrada, tiene más que ver con mantenerse saludable y con energía para enfrentar las rigurosas demandas de la maternidad con fuerzas y una sonrisa.
Puede parecer sencillo. Los doctores pueden decir: "use el sentido común". Los nutricionistas: "haga elecciones inteligentes". Pero la realidad es que, cuando usted está cansada, estresada y derramando leche materna, no siempre es fácil recordar qué constituye una dieta equilibrada.
Aquí tiene un recordatorio simple.
Una dieta equilibrada es natural, fresca y variada.
Intente incluir algo de cada grupo todos los días:
• Frutas y vegetales frescos (preferentemente, aquellas que estén en temporada) de todo tipo, crudos,
hervidos u horneados.
• Diferentes granos (trigo, arroz, maíz, cebada, mijo), preferentemente integrales, de varios tipos, enteros o cortados, y también sémola y harina (y sus productos derivados, por ejemplo, pan y pasta).
• Alimentos con proteínas de fuentes animales (productos lácteos, huevos, carne y pescado) y/o de fuentes vegetales (lentejas, porotos, soja).
• Cantidades pequeñas de grasas, preferentemente aceites vegetales crudos prensados en frío.
Se puede lograr una dieta equilibrada comiendo alimentos variados de cada uno de estos grupos, como así también consumiendo alimentos individuales en diferentes formas, por ejemplo, comer varias frutas y vegetales diferentes, o cocinando los alimentos de diversas maneras. Algunas vitaminas y proteínas puede absorberse mejor si otras están presentes al mismo tiempo.
En cuanto a la preparación, cocinar alimentos de diversas formas puede afectar qué nutriente prevalecerá en la digestión y cómo se llevará a cabo esta. Trate de asar una noche, hornear la otra, cocer al vapor la siguiente, y pedir a domicilio en la cuarta. (Porque también digiere bien cuando está feliz y relajada).
Y por último, ¡hidrátese, hidrátese, hidrátese!
El equilibrio también depende de su estado de ánimo y de mantener la autocrítica al mínimo. Por lo que la conclusión es: haga lo mejor que pueda y siempre recuerde que lograr un equilibrio es algo personal y continuo, incluso en su dieta.