Lactancia para principiantes

Antes de dar a luz, hay algunas cosas que puede hacer a fin de prepararse para la lactancia. A diferencia de lo que podría pensar, no hace falta que espere a que su bebé esté aquí para empezar a prepararse. Primero y principal, siempre debe asegurarse de priorizar su cuidado prenatal. Cuídese, esté saludable, ejercítese en forma regular y nunca se saltee sus vitaminas prenatales. Amamantar a bebés fuertes y saludables es más fácil.

Si tiene alguna inquietud, hable con su médico. Incluso si no tiene ninguna inquietud, hable con su médico. Su médico es una fuente de información sorprendente que podrá brindarle recursos, responder a sus preguntas y hasta recomendarle a especialistas o asesores de lactancia en caso de que los necesite.

Si quiere estar sumamente preparada, evalúe la opción de unirse a una clase de lactancia. Sí, son reales y, sí, tienen una parte práctica.

Por último, abastézcase de todos los elementos esenciales para la lactancia. Prepare su habitación, cree un santuario para amamantar y asegúrese de tener todo lo que necesita antes de que llegue su bebé. Le recomendamos que consiga una almohada para amamantar cómoda, que encuentre su sostén de lactancia perfecto y que se abastezca de suministros para el extractor de leche antes del parto. Por suerte, la Ley de Cuidados Asequibles (Affordable Care Act) establece que todas las madres primerizas reúnen los requisitos para recibir un extractor de leche cubierto por su proveedor de seguro médico. En el resto de este artículo, exploraremos la lactancia para principantes y le daremos algunos consejos para recién nacidos.

El ABC de la lactancia

Recuerde, amamantar no siempre es tan fácil como parece. Para muchas mujeres es difícil al comienzo, pero eso es normal. No se preocupe y siga intentándolo. Con el tiempo, usted y su bebé formarán un vínculo y crearán una rutina que funcione para los dos. Mientras tanto, le brindamos algunos consejos básicos para la lactancia.

Higiene para la lactancia

La lactancia es un momento íntimo, y el sistema inmunológico de su bebé todavía está desarrollándose. No olvide lavarse las manos siempre y usar paños o ropa limpia durante la lactancia. Si piensa extraerse leche, limpie siempre su extractor de acuerdo con las pautas de los CDC..

Cuándo comenzar la lactancia

Si su bebé nació sano, debe comenzar la lactancia casi de inmediato, dentro de 1 a 2 horas después del nacimiento. Si su bebé es prematuro o tiene complicaciones, no se recomienda la lactancia hasta que tenga la fuerza suficiente.

Después del parto, los senos se llenan rápidamente de calostro. Este es un tipo de “leche previa” que está repleta de nutrientes y que es un poco más espesa que la leche normal. La viscosidad del calostro hace que fluya lentamente; de esta forma, es más fácil para su recién nacido aprender a amamantar. Luego de unos días de amamantar, el calostro terminará y comenzará el flujo de leche verdadera.

Al principio, el cronograma de lactancia de su bebé será esporádico y frecuente, alrededor de 8 a 12 veces en 24 horas. Una vez que haya desarrollado un cronograma, la alimentación se volverá más uniforme y espaciada.

Las primeras noches

Es habitual que pase toda la noche despierta amamantando a su recién nacido durante las primeras noches. El cuerpo del bebé se está adaptando a la vida fuera del vientre y tiene hambre todo el tiempo. Esto es absolutamente normal. A la mayoría de las madres les preocupa no estar produciendo suficiente leche para satisfacer a su bebé. No se preocupe, su cuerpo está reaccionando exactamente como debería. Si quiere abordar estas inquietudes, llame a su médico.

Cuanto mayor sea la frecuencia con que se alimente su bebé, más leche producirá su cuerpo. Evite complementar la leche con fórmula, ya que esto hará que su cuerpo reduzca el suministro de leche y que la lactancia sea más difícil.

Señales de hambre a las que debe prestar atención

Aunque los recién nacidos no pueden hablar en forma verbal, igualmente pueden comunicar sus necesidades a través de reflejos y señales de hambre. Los bebés muestran el reflejo de succión y el reflejo de búsqueda cuando tienen hambre.

El reflejo de succión se produce cuando usted comienza a amamantarlo. Cuando el bebé siente que algo le toca el paladar, comienza a succionar de inmediato. El reflejo de búsqueda se produce cuando su bebé voltea la cabeza y comienza a succionar cuando se le toca la mejilla.

Si su bebé hace movimientos de succión, abre o cierra la boca, y voltea la cabeza para intentar succionar el objeto más cercano, tiene hambre.

Algunas otras señales más sutiles incluyen las siguientes:

  • Despertarse agitado de una siesta.
  • Abrir los ojos.
  • Hacer gorjeos.
  • Sacar la lengua.
  • Llevarse las manos a la boca.
  • Hacer gorjeos.

 

Si su bebé empieza a llorar, significa que no se detectaron sus señales de hambre y está empezando a ponerse de mal humor. Intente aprender las señales de hambre de su bebé para que la lactancia sea más fácil y evitar dolores de cabeza.

Cómo saber si su recién nacido se está prendiendo

Uno de los desafíos principales de la lactancia es que el bebé se prenda. Si su bebé no se prendió correctamente, la lactancia se vuelve más difícil y aumenta el malestar. Para asegurarse de que su bebé se esté prendiendo correctamente, dirija el pezón hacia su paladar. Esto inducirá el reflejo de succión. Debe ser cómodo y producir la sensación de que está jalando.

Mire a su bebé después de que se haya prendido. Debe tener los labios relajados formando un puchero y cubrir casi toda su areola. Debe ver que mueve la mandíbula hacia adelante y atrás. Si no siente dolor y ve que el bebé está succionado y tragando, ¡su recién nacido se ha prendido correctamente!

Si tiene alguna pregunta sobre si su bebé se prendió correctamente o no, comuníquese con su médico o con un especialista en lactancia.

Técnicas para que el bebé se prenda correctamente

Si siente malestar durante la lactancia, una de las primeras cosas que debe hacer es intentar cambiar su técnica. Se sabe que los bebés imitan cosas que están dentro de su campo de visión, así que acérquelo hacia usted y abra y cierre la boca mientras jala suavemente de la barbilla del bebé. Esto ayudará a mejorar la capacidad de su bebé de abrir la boca lo suficiente para prenderse de forma correcta.

Intente pellizcarse el seno para ayudar a elongar el pezón y alinearlo con la boca de su bebé. Esto facilitará que su bebé se prenda y garantizará que obtenga el máximo beneficio por sus esfuerzos. Asegúrese de que tenga los labios bien separados para evitar dolores y, si no lo están, sepáreselos suavemente.

Cómo prepararse para el primer popó de su bebé

Una vez que comience la lactancia, con el tiempo, su bebé experimentará su primer popó. Este popó será importante. El calostro actúa de forma similar a un laxante y ayuda a que el bebé logre su primer número 2, que se llama meconio. Tiene su propio nombre porque es algo muy único. El meconio es negro, pegajoso y verá que tiene un aspecto similar a la brea. No se alarme. Esto es normal y dejará de tener este aspecto cuando se haya expulsado el calostro de su sistema. Después de eso, el popó de su bebé tendrá un color verdoso y, luego, comenzará a ser cada vez más amarillento hasta adquirir el típico color marrón.

Cómo cargar a su bebé mientras lo amamanta

También hay diferentes posiciones para intentar ayudar a que el bebé se prenda y aumentar la comodidad.

Recostarse de lado

Recuéstese y coloque a su bebé muy cerca de usted. Use una almohada que la ayude a sostenerse y comience a amamantar. ¡No se duerma en esta posición!

Sujetarlo como si fuera un balón

Sujete a su bebé como si fuera un balón. Colóquelo debajo de su brazo, a lo largo de su lateral y coloque la cabeza del bebé en su mano. Sosténgalo con el antebrazo y asegúrese de que esté volteado hacia usted.

Acunar

Coloque la cabeza de su bebé en el recodo de su brazo y sosténgalo con el antebrazo. Con esta posición, se asegurará de que el seno esté directamente frente al rostro de su bebé.

Acunar en forma cruzada

Esta posición es igual a la anterior, excepto que debe sostener al bebé con el brazo opuesto del seno con el que está amamantando. Esta posición es excelente para bebés que necesitan un poco más de apoyo en la cabeza o que tienen dificultad para succionar.

Cómo lidiar con las molestias

Si experimenta dolor en el pezón durante la lactancia, no siga soportándolo. Si bien es común que tenga sensibilidad, la lactancia no debería provocar grietas, sangrado ni dolor excesivo. Si experimenta algo de esto, modifique su posición de lactancia. La profundidad con que se prenda su bebé cambiará en una posición diferente, lo que ayuda a evitar la presión excesiva en el pezón. Si sigue sintiendo molestia o dolor, hable con su médico o considere contratar a un asesor de lactancia. También le recomendamos que elija una crema para pezones segura para el bebé que la ayude a mitigar cualquier dolor.

Conclusión

La lactancia es un proceso difícil para muchas madres primerizas. Es una experiencia completamente nueva y, si bien espera hacerlo sin inconvenientes, generalmente este no es el caso. Rodéese de un equipo de apoyo fuerte y no tema buscar ayuda si la necesita. Para facilitar sus esfuerzos de lactancia, su médico la ayudará a encontrar a un asesor o especialistas en lactancia. Además, gracias a la Ley de Cuidados Asequibles (Affordable Care Act), las madres primerizas reúnen los requisitos para recibir un extractor de leche eléctrico, pagado por su proveedor de seguro . Ahora que está lista para comenzar a amamantar a su bebé, conozca nuestra amplia selección de extractores de leche manuales y eléctricos.

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