¿Qué es una asesora de lactancia?

Si tiene problemas para amamantar, no se sienta sola. Millones de mujeres tienen dificultades para hacer que su bebé se prenda al pecho o con el caudal de leche en algún momento de su camino como mamás primerizas. La lactancia es algo difícil de dominar, pero es algo por lo que vale la pena luchar. La lactancia tiene incalculables beneficios tanto para usted como para su bebé, así que, si tiene problemas, no se dé por vencida. Cuenta con personas capacitadas para ayudarla.

Una asesora de lactancia es una profesional de la medicina que se especializa en el manejo clínico de la lactancia. Su trabajo es ayudar a que las mamás que están teniendo dificultades con la lactancia logren sentirse cómodas y estar preparadas. Las asesesoras de lactancia cuentan con capacitación en ciertas técnicas para lograr que el bebé se prenda correctamente al pecho y  se las considera expertas en todo lo que respecta a la lactancia. Muchas asesoras de lactancia trabajan codo a codo con los hospitales; sin embargo, también muchas trabajan en clínicas, consultorios de pediatría o incluso ejercen la profesión de manera privada. En este artículo, profundizaremos aún más en la respuesta a la pregunta: ¿qué es lo que hace exactamente una asesora de lactancia?

Certificados de asesora de lactancia

Para ser una asesora de lactancia, tiene que obtener uno de estos dos tipos de certificados. El primero se llama Consultora Certificada en Lactancia (o CLC) y el otro se denomina Consultora Internacional Certificada en Lactancia (IBCLC). Para lograr el certificado como una CLC, usted emplea la capacitación semanal para asegurarse de que está preparada para ayudar a las mujeres que lo necesiten. Requiere mucho más trabajo lograr el certificado como IBCLC. Se debe pasar por muchas horas de práctica clínica, aprobar un examen y seguir con la capacitación y certificación durante años. El certificado como IBCLC está más relacionado con la profesión médica y se debe volver a revalidar esa certificación cada cinco años.

Cuándo llamar a una asesora de lactancia

El tipo de asesora de lactancia que elija depende de usted, pero  en algunas ocasiones debe llamar a una asesora de lactancia para asegurarse de que su bebé se desarrolla de manera saludable.

Cuando su bebé no sube de peso

Si usted sigue los procedimientos de la lactancia, pero su bebé no sube de peso, posiblemente no se esté prendiendo correctamente al pecho o no tenga la leche suficiente al alimentarse. Hable con su pediatra para asegurarse de que su bebé esté subiendo de peso normalmente y si no lo está haciendo, llame a una asesora en lactancia.

Cuando se sienta abrumada

Si está teniendo inconvenientes para amamantar, se siente frustrada y está lista para darse por vencida, llame a una asesora de lactancia. El problema podría solucionarse con facilidad y, una vez corregido, tenga como resultado una lactancia natural.

Cuando tenga dolor

  Si la lactancia le produce un dolor continuo, tiene que consultar con una asesora en lactancia. Ellas tiene la capacitación para ayudarla a evitar dolores durante la lactancia y podrán brindarle asistencia para que encuentre la posición y la manera perfectas de que su bebé se prenda al pecho que disminuya su incomodidad y mejore el caudal de leche.

Cuando tenga más de un bebé

Si tiene mellizos, o incluso trillizos, la lactancia puede ser una tarea aún más difícil. Hablar con una asesora de lactancia la ayudará a preparse para lo que debe esperar, cómo asegurarse de que su caudal de leche se mantenga alto y cómo amamantar mejor a dos bebés a la vez.

Bebés con necesidades especiales

Por último, si su hijo tiene una afección que dificulta la lactancia, hable con una asesora de lactancia sobre cómo modificar la forma de amamantar para que se adapte mejor a la afección de su bebé.

Si bien todas somo distintas, si se siente particularmente ansiosa sobre la lactancia antes de su fecha de parto, considere trabajar junto con una asesora de lactancia con anticipación para prepararse para el gran día.

Qué debo esperar de una asesora de lactancia

Cuando trabaje junto a una asesora de lactancia antes del parto, usted estará adelantada a las cirucunstancias para cuando nazca su bebé. Y si espera hasta el momento del parto, ¡también está bien!  Trabajar junto a una asesora de lactancia es una excelente forma de llevar la lactancia al próximo nivel. Cuando trabaje con una asesora de lactancia antes del parto, estas son algunas de las cosas que repasarán:

Si tiene dudas, simplemente inténtelo. Lo peor que puede pasar es que decida que una asesora de lactancia no es algo para usted. Lo mejor es que usted obtiene la ayuda que necesita para seguir brindando una lactancia saludable para su bebé. Si necesita más motivación, considere un estudio reciente que demostró que conseguir la ayuda de asesoras en lactancia aumentaron en forma cuantitativa los índices de lactancia y ayudaron a más mujeres a concentrarse exclusivamente en la lactancia de sus bebés recién nacidos. Si desea amamantar, pero tiene inconvenientes, inténtelo con la ayuda de una asesora en lactancia antes de pasar a la leche de fórmula.

Cómo encontrar la asesora de lactancia indicada

Si bien encontrar una asesora de lactancia es importante, lo es incluso más encontrar la indicada para usted. Estará trabajando con esta persona en un entorno muy sensible y vulnerable, de modo que posiblemente quiera asegurarse de sentirse lo más cómoda posible durante el tiempo que trabajen juntas. Para asegurarse de encontrar la asesora de lactancia indicada, hay algunas cosas que debe hacer.

Haga una entrevista

Aunque parezca un poco raro entrevistar a una persona que va a ayudarla con la lactancia, eso marcará toda una diferencia. Usted va a pasar mucho tiempo con la asesora de lactancia y va a ser un tiempo muy personal. Su trabajo es muy práctico y posiblemente usted quiera saber si va a llevarse bien con la asesora de lactancia. Entreviste a varias asesoras antes de contratar a una. Se presentan distintos tipos de personalidad en las asesoras de lactancia en donde algunas adoptan un enfoque más médico y otras tienen un enfoque más comprensivo.

Asegúrese de sentirse cómoda

Esto va de la mano de la recomendación anterior. La especialista en lactancia va a ayudarla a amamantar, así que va a estar tocando y manipulando sus senos. Busque a una persona con la que se sienta cómoda para hacer esto; hará que toda la experiencia sea mucho más sencilla. Si no se siente cómoda durante la entrevista o no considera que hubo conexión, probablemente no se sienta cómoda cuando comience el trabajo de verdad.

Conozca su filosofía

Durante la consulta o entrevista inicial, pregunte sobre la filosofía que tiene la asesora de lactancia. Encontrar a una persona que tenga la misma filosofía que usted es absolutamente fundamental. Sepa qué es lo que piensa sobre la alimentación con leche de fórmula y de los complementos de modo que pueda sentirse respaldada, sin importar lo que suceda. Si usted se encuentra con una asesora de lactancia que tiende a avergorzar a las mamás que alimentan a sus hijos con leche de fórmula y considera que podría terminar usando leche de fórmula, pase a la siguiente candidata.  No hay necesidad de que termine en una situación en la que se sienta mal por sus decisiones, especialmente después de haberlo intentado al máximo.

Sea abierta y honesta

Cuando encuentre una asesora de lactancia con la que se sienta cómoda, no se guarde nada. Tiene que decirle todo lo que le pasa ya que existen muchas cosas distintas que podrían estar afectando el caudal de leche. Prepárese para sentirse vulnerable, ya que incluso se tendrán que conversar temas del posparto. El caudal de leche es muy sensible en su cuerpo y se sorprendería con todas las cosas que pueden afectarlo.

Busque la comunicación indicada

Por último, asegúrese de contratar a una asesora de lactancia que tenga el mismo estilo de comunicación que usted. Esto implica tanto durante las visitas presenciales como cuando necesite comunicarse con ella durante la semana. Si prefiere hablar por teléfono, encuentre a una asesora a la que no le moleste atender una llamada telefónica. Si usted es una persona que prefiere hacer videollamadas, asegúrese de que la asesora de lactancia también domine la tecnología para que pueda acompañarla.

Es posible que lleve un poco de tiempo encontrar a la asesora de lactancia perfecta, pero cuando lo consiga hará que todo el proceso sea mucho más sencillo a largo plazo. Para obtener una lista de asesoras de lactancia en su localidad, asegúrese de hacer una búsqueda rápida en Google o hable con su médico para que le de recomendaciones. Le sugerimos comenzar en el sitio web de la  International Lactation Consultant Association (Asociación Internacional de Asesoras de Lactancia) y que parta desde allí.

Conclusión

La lactancia es un momento mágico para la mamá y el bebé, pero es frecuente que las mamás primerizas enfrenten contratiempos antes de dominarla. Una vez que supere los desafíos, su cuerpo podrá suministrarle constantemente a su bebé lo que necesita. Para recibir ayuda para que la lactancia sea más sencilla, o si está luchando y siente que desea abandonar, hable con su médico para buscar una puericultura o un especialista en lactancia. Además, gracias a la Ley de Cuidados Asequibles (Affordable Care Act), las madres primerizas reúnen los requisitos para recibir un extractor de leche eléctrico, cubierto por su proveedor de seguro médico..

Si tiene sugerencias o consejos sobre la lactancia o desea compartir su experiencia con una asesora de lactancia, visite nuestra  página de Facebook ¡y deje un comentario!