Hitos clave del habla, la audición y la visión del recién nacido
Los hitos más importantes en la vida de un recién nacido son momentos muy emocionantes para los padres. El primer paso, la primera palabra, la primera sonrisa y la primera risa de su bebé suelen quedar registrados en su álbum. Sin embargo, también hay que prestar atención a otros hitos menos evidentes. Hitos clave del habla, la audición y la visión del recién nacido
Hitos del habla y la audición adecuados según la edad
A diferencia de la vista, las capacidades auditivas de su bebé son plenamente funcionales desde el momento en que nace. Esto se debe a que las estructuras auditivas internas se desarrollan en el vientre materno. Sin embargo, eso no significa que los recién nacidos sepan cómo reaccionar ante los sonidos. Estos son algunos hitos del seguimiento del habla y la audición una vez que ambos hayan sido dados de alta del hospital:
- Desde el nacimiento a los 3 meses
- Reacciona a ruidos o sonidos fuertes con el reflejo de sobresalto
- Los recién nacidos se pueden calmar y pueden dejar de llorar al escuchar sonidos suaves
- Empieza a voltear la cabeza cuando se le habla
- Puede despertarse si hay sonidos fuertes o conversaciones cerca
- Empieza a reconocer ciertas voces y sonríe en respuesta
- Reconoce las voces de mamá y papá
- De 4 a 6 meses
- Mira o se mueve activamente ante nuevos sonidos
- Imita su propia voz, puede empezar a balbucear
- Disfruta con juguetes que emiten sonidos, como sonajeros y móviles musicales
- Empieza a reconocer cambios en los tonos de voz
- Puede empezar a repetir pequeños sonidos (por ejemplo, ba-ba u ooh)
- Sigue reaccionando a los ruidos fuertes o a las voces
- De 7 a 12 meses
- Puede empezar a balbucear incluso cuando está solo
- Responde a su nombre
- Responde a voces familiares
- Primeras palabras del bebé
- Empieza a utilizar palabras de objetos comunes (p. ej., adiós, taza, zapato, mamá, papá)
- Puede responder a peticiones sencillas (por ejemplo, decir adiós con la mano)
- Imita palabras y sonidos sencillos
- 1 a 2 años
- Empieza a utilizar palabras que se usan a menudo en casa
- Sigue órdenes simples y hace gestos
- Empieza a formar pequeñas frases
- Comprende preguntas sencillas de tipo sí-no
- Le gusta que le lean
- Puede elegir las cosas por tamaño
- Empieza a entender las palabras de acción
Consejos para estimular la audición del bebé
Puede empezar a fortalecer la audición de su pequeño desde el mismo día de su nacimiento. Algunos consejos para hacerlo son:
- Hable a su bebé con regularidad, narrándole las actividades cotidianas.
- Utilice diferentes tonos y matices al hablar.
- Reproduzca distintos géneros musicales.
- Cántele con frecuencia.
- Lea en voz alta libros con rimas y patrones rítmicos.
- Utilice juguetes que hagan ruido, como sonajeros y juguetes musicales.
- Introduzca sonidos domésticos suaves a un volumen seguro.
- Reproduzca ruidos blancos para imitar los sonidos del útero.
- Señale y explique a su bebé los ruidos cotidianos.
- Estimule a su bebé para que responda a los sonidos.
- Exponga a su bebé a diferentes lenguas y acentos.
- Practique las conversaciones por turnos imitando sus sonidos.
- Asista a clases de música o sonidos para bebés para un aprendizaje interactivo.
- Asegúrese de que el entorno del sueño sea tranquilo y sin ruidos fuertes.
- Observe las respuestas de su bebé a los sonidos.
- Programe controles auditivos periódicos con su pediatra.
Cómo fomentar el desarrollo del habla y el lenguaje
También existen muchas formas de estimular el desarrollo del habla y el lenguaje de su bebé. Algunas de las más beneficiosas son:
- Hable a menudo con su bebé, describiéndole lo que está haciendo.
- Emplee un lenguaje sencillo y claro cuando hable con su bebé.
- Repita palabras y frases a menudo.
- Lea libros en voz alta a diario, incluso a los recién nacidos.
- Elija libros con dibujos sencillos y texto repetitivo.
- Cante canciones y rimas infantiles de manera regular.
- Practique juegos interactivos como el escondite y las palmaditas.
- Comuníquese mediante gestos y expresiones faciales.
- Evite el lenguaje infantil; utilice palabras y frases correctas.
- Anime a los hermanos mayores o a los miembros de la familia a hablar y jugar con su bebé.
- Supervise los progresos de su bebé y responda a sus intentos de comunicación.
- Celebre y fomente cualquier comunicación verbal o no verbal.
Cuándo acudir al médico en relación con el desarrollo del habla y la audición
Probablemente a su recién nacido le hicieron una prueba de audición antes de darle el alta, de modo que ya deberían haber detectado problemas importantes. Aun así, si observa que su bebé deja de responder o no se sobresalta con los ruidos fuertes, es importante que consulte con su pediatra. Los problemas auditivos también pueden aparecer en etapas posteriores, por lo que la American Academy of Pediatrics recomienda realizar revisiones periódicas a los 4, 5, 6, 8 y 10 años de edad, además de durante el desarrollo del recién nacido.
Hitos de la visión a distintas edades
La vista de su bebé es deficiente; puede ver entre 20/200 y 20/400 al nacer. Esto significa que puede ver a 20 pies lo que alguien con visión perfecta ve a 200 o 400 pies. Básicamente, los bebés son casi ciegos hasta que se desarrolla su visión. Pueden ver formas borrosas, pero el mundo nítido al que estamos acostumbrados no es algo con lo que nacemos, sino que tarda algún tiempo en desarrollarse. Para ayudarlo a realizar un seguimiento de la visión del bebé en los primeros meses de vida, tenga en cuenta algunos de los siguientes hitos.
- Desde el nacimiento al 1.° mes
- Los recién nacidos ven en blanco, negro y tonos de gris
- La visión del color comienza a desarrollarse lentamente
- Pueden ver objetos a una distancia de 8 a 10 pulgadas
- Los recién nacidos son muy sensibles a las luces brillantes
- Los ojos parecen mucho más grandes que su cuerpo
- Los ojos pueden no estar coordinados o parecer bizcos
- Los recién nacidos pueden centrar la atención en la cara de sus padres o en la luz, y luego desviar la mirada hacia objetos en movimiento
- Del 1.° mes a los 3 meses
- Pueden ver objetos a una distancia de 12 pulgadas
- Enfocan los rostros y las imágenes que tienen un alto contraste
- Tienden a fijarse más en las caras de los padres
- Los recién nacidos pueden seguir objetos hasta 90 grados
- Comienzan a formarse sus conductos lagrimales
- Pueden seguir objetos con mayor precisión
- Empiezan a explorar sus propias manos
- Empiezan a detectar caras conocidas
- Se fortalece la memoria visual
- A los 4 meses
- La visión se vuelve más clara
- Se empieza a desarrollar la percepción de la profundidad
- Los bebés pueden empezar a buscar objetos en su campo visual
- Pueden reconocerse en el espejo
- Los bebés pueden reconocer su biberón
- A los 6 meses
- La visión del color se ha desarrollado completamente
- Empiezan a girar la cabeza para ver diferentes objetos
- Los bebés empiezan a preferir ciertos colores
- Pueden intentar tocar su propio reflejo en un espejo
- De los 7 a los 12 meses
- Comienzan a jugar al escondite
- Se fortalece la percepción de la profundidad
- Pueden seguir objetos que se mueven rápidamente
- De 1 a 2 años
- La coordinación entre manos y ojos ya debería estar bien desarrollada y activa
- Pueden colocar formas en los agujeros correspondientes
- Los niños ya deberían mostrar interés por su entorno
- Los niños pueden reconocer objetos e imágenes familiares en los libros
Si bien se puede sospechar que existen problemas en los niños que no responden a los estímulos visuales en estos hitos, esto no es determinante. Sin embargo, las pautas relacionadas con la edad pueden ayudarlo a decidir si su hijo debe o no consultar con un optometrista pediátrico. En muchos casos, aunque los hitos se presenten con normalidad, es bueno solicitar una cita y obtener la confirmación de un desarrollo adecuado.
¿Puede ayudar a su bebé a desarrollar la vista?
Como padres primerizos, pueden hacer distintas cosas para ayudar al desarrollo visual de su bebé. Las actividades adecuadas a su edad pueden reforzar la salud ocular y favorecer el correcto desarrollo de los ojos de su hijo. Algunas de las cosas más beneficiosas que puede hacer incluyen:
- Colocar una luz nocturna en la habitación del bebé.
- Modificar la posición de la cuna de su hijo o su orientación al dormir para cambiar el entorno visual.
- Estimular el juego con juguetes que se puedan tocar y alcanzar y que cuelguen a una altura entre ocho y doce pulgadas por encima de su cara.
- Hablar con su bebé mientras pasea y conoce nuevos entornos.
- Colgar un móvil o un gimnasio de cuna en la habitación del bebé.
- Alternar los lados de alimentación para que los ojos de su hijo giren de forma natural hacia cada lado.
- Fomentar el juego y la exploración.
- Incorporar juegos sensoriales..
- Practicar juegos de manos para desarrollar la coordinación entre los ojos y las manos.
- Jugar al escondite para reforzar la memoria visual.
- Nombrar objetos al hablar para ayudar a relacionarlos con las palabras.
- Jugar con pelotas, haciéndolas rodar de un lado a otro, para que el niño aprenda a seguir objetos en movimiento.
- Jugar con bloques de construcción y pelotas de diferentes formas y tamaños para estimular la motricidad fina y el reconocimiento visual.
Cuándo consultar al médico sobre el desarrollo de la visión
Recuerde que no todos los niños seguirán el mismo proceso de desarrollo. Los niños alcanzan hitos a edades diferentes, por lo que es importante tener paciencia y evitar compararlos con los demás. Sin embargo, no alcanzar los hitos puede ser un signo de problemas auditivos o visuales, por lo que es importante hacer un seguimiento y visitar regularmente al pediatra. En las visitas regulares, el pediatra evaluará si hay problemas con los cinco sentidos.
Dicho esto, los bebés prematuros suelen tener un mayor riesgo de sufrir problemas de visión, por lo que se recomienda acudir a un oftalmólogo pediátrico cuando el bebé tenga 1 o 2 años.
También hay algunos indicios que podrían señalar un problema. Si observa alguno de los siguientes indicios, llame a su pediatra para que lo aconseje o le programe una revisión:
- Pupilas de distintos tamaños
- Ojos que no están correctamente alineados en todas las direcciones
- Ojos que no funcionan conjuntamente o que se mueven de forma cohesiva
- Lagrimeo excesivo o costras a lo largo de los ojos
- Mirar las luces durante mucho tiempo
- Sensibilidad extrema a la luz
- Incapacidad para seguir un objeto en movimiento
- Aparición de una pupila blanca
Por supuesto, puede llamar a su pediatra siempre que esté preocupado por el desarrollo de su pequeño.
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