Una mujer sostiene a su bebé recién nacido en el hospital.

¿Qué hay que saber sobre las evacuaciones intestinales posparto?

A lo largo de su embarazo, su cuerpo experimenta varios cambios. Entre las fluctuaciones hormonales, el desarrollo del bebé y la producción de leche materna, es comprensible que se sienta abrumada. Aunque estos cambios indican que se está preparando para darle la bienvenida al mundo a su bebé, afectan a todos los sistemas del cuerpo, incluido el digestivo. Es habitual que se sienta nerviosa ante su primera evacuación posparto, en especial si ha dado a luz de forma natural, pero lo superará. A medida que su cuerpo se cura, poco a poco volverá a sentirse como antes. Mientras tanto, es una buena idea familiarizarse con lo que debe esperar durante su primera visita al baño. Aquí encontrará todo lo que necesita saber acerca de los movimientos intestinales posparto.

 

Cómo afecta el parto a los movimientos intestinales

Hay varios factores distintos que pueden afectar sus movimientos intestinales después del parto, todos son completamente normales después de dar a luz. Los más habituales son son los siguientes.

 

  • Cambios corporales: su útero se contrajo, los músculos del piso pélvico se debilitaron y la desborda una cantidad de hormonas que pueden afectar su forma de ir al baño. Trate de ser paciente a medida que su cuerpo se cura y recuerde que es una parte habitual de convertirse en madre.

     

  • Intervenciones médicas: durante el parto, tanto las mujeres que dan a luz de forma natural como las que se someten a una cesárea tendrán problemas intestinales después del parto. Hable con su médico sobre las preocupaciones específicas del parto. Los medicamentos, los suplementos, las restricciones del parto y la sutura perineal también pueden complicar sus movimientos intestinales después del parto.

     

  • Miedo o vergüenza: es habitual sentir ansiedad con respecto a su primera evacuación intestinal después del parto. Incluso la primera vez que orina puede dar miedo. Intente no ponerse nerviosa ni avergonzarse, es algo que les sucede a todas las madres primerizas.

     

  • Fatiga y distracción: el agotamiento que se produce después del parto mezclado con la excitación de un recién nacido puede contribuir a aumentar las tasas de constipación. Intente comer los alimentos que le den en el hospital para ayudar a poner en marcha su sistema digestivo y fomentar el movimiento intestinal.
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Movimientos intestinales posparto: qué debo esperar

Los movimientos intestinales posparto no son atractivos y es natural experimentar diferentes tipos de malestar. Algunas mujeres se sienten extremadamente constipadas durante unos días, mientras que otras tienen diarrea o incontinencia fecal. No es un cambio permanente en la forma en que su cuerpo eliminará los desechos y no hay nada de qué avergonzarse durante este tiempo de curación. Para ayudarla a prepararse mejor, estas son algunas de las cosas que podrían courrir.

Constipación

La constipación es uno de los problemas más habituales que experimentan las mujeres después del parto. Debido a la combinación de estrés, falta de alimentos durante el parto y deshidratación, es normal sufrir constipación después de tener un bebé. Muchas mujeres no sienten la necesidad de evacuar, pero es importante revitalizar su sistema para evitar complicaciones.

Hemorroides

Las hemorroides se producen cuando las venas del ano o de la parte inferior del recto se inflaman e irritan. Esto es normal durante todo el embarazo y después del parto. En ocasiones, las hemorroides pueden ser dolorosas y dificultar el movimiento intestinal. Si presenta algún signo de hemorroides, ya sea externo o interno, póngase en contacto con su médico para conocer las opciones de tratamiento.

Diarrea

Aunque es menos común que la constipación, hay mujeres que tienen diarrea después del parto. Hable con su médico sobre los suplementos, intente aumentar su consumo de fibra y asegúrese de beber mucha agua para evitar la deshidratación.

Por lo general, la mayoría de las madres primerizas tienen su primera evacuación posparto entre tres y cinco días después. Sin embargo, como mencionamos antes, cada persona es diferente, así que escuche a su cuerpo. Si tiene alguna duda o sigue sin evacuar después de una semana, hable con su médico. Sus tiempos no son necesariamente anormales, pero los episodios más prolongados de constipación pueden requerir asistencia médica.

 

Cómo aliviar los problemas de evacuación habituales en el posparto

Los movimientos intestinales posparto tendrán que producirse en algún momento, pero puede hacer algunas cosas para aliviar las molestias y asegurarse de que todo suceda sin problemas.

No haga esfuerzo

Una de las cosas más importantes que hay que tener en cuenta a la hora de evacuar después del parto es que no se recomienda hacer esfuerzo. Cuando se hace fuerza de manera excesiva, se corre el riesgo de romper la sutura perineal, así como de sufrir una hernia. En ambos casos, solo se logrará que las evacuaciones sean más difíciles e incómodas. Intente empujar con suavidad cuando sienta la necesidad de ir al baño y concéntrese en la respiración. Inspire y luego empuje de a poco mientras exhala lentamente. Si no lo logra de esta forma, espere hasta que tenga ganas de ir.

Intente estar cómoda

Si tiene hemorroides, una hernia o una fisura anal, hable con su médico sobre las formas de mantenerse cómoda mientras evacúa. Estos problemas pueden ser dolorosas para cualquiera, pero cuando se combinan con la recuperación posparto, pueden resultar bastante abrumadoras. Hay opciones de tratamiento, así que matenga la calma y haga lo que pueda.

Cambie su postura

Los adultos están acostumbrados a sentarse bastante erguidos en el inodoro, pero nuestro sistema digestivo está construido de forma diferente. La forma más eficaz de evacuar es poner los pies sobre un taburete y ponerse en cuclillas, como si estuviera agachada en el inodoro. Asegúrese de estar cómoda e inclínese un poco hacia delante. Esto permite alinear de forma correcta el recto con el colon y facilita el proceso. Hay productos en el mercado diseñados para lograr esta posición, o simplemente puede utilizar un taburete en su casa.

Hidrátese

Beber mucha agua la ayudará a recuperar los líquidos perdidos y a reducir el riesgo de constipación. El parto es extremadamente agotador para su cuerpo. El cuerpo necesita el agua que se pierde a través del sudor y el agotamiento para seguir funcionando con normalidad. Además, si bebe suficiente agua, ayudará a mantener las heces blandas y evitará movimientos intestinales extenuantes con heces potencialmente dolorosas. Para una mayor hidratación, pruebe con beber agua de coco. Tiene un alto contenido de potasio, y esto ayuda a reponer los electrolitos.

Coma mucha fibra

Algunos alimentos son mejores que otros después del parto, en especial si tiene signos de constipación. Asegúrese de consumir mucha fibra a través de alimentos naturales. Si no puede consumir lo suficiente mediante frutas y verduras enteras, hable con su médico sobre la posibilidad de tomar un suplemento de fibra diario, como Metamucil.

Haga ejercicio

No se recomienda hacer ejercicios extenuantes inmediatamente después del parto, pero caminar puede hacer maravillas para todo el cuerpo. Caminar ayuda a estimular los intestinos y reduce el riesgo de constiparse. También puede ayudarla a fortalecer su torso y los músculos del piso pélvico, lo que acelera la recuperación posparto. Si quiere, trate de llevar a su recién nacido a un paseo diario por el vecindario. Si no es así, el simple hecho de pasear por su casa puede ayudarla a obtener los beneficios.

Pruebe un ablandador de heces

Es probable que su médico le recete un ablandador de heces después del parto; tómelo. Son seguros y aumentan la humedad de las heces, lo que facilita la evacuación. A diferencia de los laxantes, los ablandadores trabajan con el sistema digestivo natural del cuerpo y no provocan la necesidad de evacuar.

Ejercicios para el piso pélvico

La fuerza del piso pélvico disminuye enormemente durante el embarazo y el parto a causa de la presión del crecimiento del bebé y el esfuerzo del parto. Comience a incorporar a su rutina diaria algunos ejercicios simples para el piso pélvico. Los ejercicios de Kegel son una gran opción y pueden realizarse en cualquier momento y lugar. Esto le ayudará a recuperar la fuerza de los músculos de soporte y a regular mejor los movimientos intestinales.

 

Cuándo buscar ayuda

Aunque se sienta completamente abrumada con el seguimiento de los cambios de su recién nacido, recuerde que también debe prestarse atención a usted misma. Intente hacer un seguimiento de sus visitas al baño durante las primeras semanas para asegurarse de que el cuerpo se está reajustando y volviendo a la normalidad. No hace falta que el seguimiento sea específico, basta con anotar cuándo ha evacuado. Si no ha evacuado en la semana siguiente al parto, comuníquese con su médico. La constipación demasiado prolongada puede generar otras complicaciones potencialmente graves. Para cualquier pregunta relacionada con los movimientos intestinales, no tenga vergüenza de llamar al médico. Todas las madres primerizas experimentan esta situación y es completamente normal tener preocupaciones.

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