8 maneras de ayudar a un bebé que está de nalgas a cambiar de posición
En una posición de nalgas, los pies del bebé están cerca del cuello del útero y el cuerpo está en posición de cabeza levantada dentro del útero. Es bastante común que los bebés estén en esta posición en algún momento del embarazo, por lo que si el médico dice que el bebé está de nalgas al principio, no hay motivo para sacar conclusiones apresuradas. En la mayoría de los casos, el bebé volverá a colocarse con la cabeza hacia abajo a medida que se acerque la fecha de parto. El médico estará monitoreando esto a medida que avanza el embarazo. En caso de que esto no suceda, hay algunas cosas que se pueden hacer para ayudar a fomentar un movimiento pequeño. A continuación, analizaremos ocho maneras de ayudar a un bebé que está de nalgas a cambiar de posición naturalmente.
Tipos diferentes de presentaciones de nalga
La posición de nalgas simplemente se refiere a estar en una posición de cabeza hacia arriba, pero hay otros tipos diferentes de situaciones que se incluyen en esta definición.
- Franca de nalgas: las piernas del bebé están ambas hacia arriba contra la cabeza, casi en una posición flexionada hacia adelante. La cola está muy cerca del canal de parto.
- Incompleta de nalgas: uno de los pies del bebé está recto y el otro, flexionado en la rodilla. Uno de los pies y la cola están muy cerca del canal de parto.
- Completa de nalgas: el bebé tiene ambas rodillas flexionadas. Ambos pies y la cola están muy cerca del canal de parto.
7 métodos naturales para corregir una posición de nalgas en el hogar
Las siguientes técnicas se pueden utilizar en cualquiera de los tipos de posiciones de nalgas antes mencionados para ayudar a cambiar la posición del bebé. Siempre consulte con su médico para asegurarse de que puede practicar de forma segura cualquier técnica a la que no está acostumbrada y para continuar monitoreando la posición del bebé. Si bien estos métodos pueden ayudar a que el bebé se coloque en una posición más segura, algunas veces pueden volver a la posición de nalgas. Si se conoce esta situación de antemano, se puede preparar para un parto seguro.
1. Inclinación de la pelvis
El método de inclinación de la pelvis también es conocido como inclinación de nalgas o técnica de tabla de planchar. Está dirigida a corregir la posición de nalgas del bebé mediante el uso cuidadoso de la gravedad para ayudarlo a cambiar de posición. Todo lo que debe hacer es recostarse de espaldas y levantar la cadera por encima del corazón. Si tiene dificultad para mantener esta posición de forma cómoda, coloque algunas almohadas debajo de la cadera para ayudarse. También podría utilizar una madera plana, como una tabla de planchar, para obtener apoyo adicional. En la posición correcta, la cabeza debería estar contra el piso con la pelvis hacia arriba en el aire. Puede practicar esto tres veces al día, aumentando de 10 a 15 minutos. Si esta posición le produce mareos, abandone el ejercicio de inclinación de la pelvis y hable con el médico. No lo intente nuevamente hasta hablar con un profesional de la medicina.
2. Inclinación hacia adelante
Otra opción de bajo impacto es tratar la inversión inclinándose hacia adelante y otras posiciones parecidas. El objetivo es simplemente dar espacio para que el bebé se mueva y corrija la posición. Una opción es apoyarse sobre las manos y las rodillas y balancearse suavemente hacia adelante y hacia atrás. Puede hacer esto durante aproximadamente 10 a 15 minutos antes de irse a la cama cada noche como parte de su rutina de preparación para dormir. Otra opción es imitar la posición del bebé y descansar durante la misma cantidad de tiempo. Aunque no se comprobó científicamente que ayuden a corregir la posición de nalgas, estas posiciones actúan como abridor de cadera y pueden proporcionar el espacio que el bebé necesita para darse vuelta. Además, no le harán daño al bebé y pueden ser muy relajantes.
3. Música
Muchas embarazadas reproducen música para sus bebés durante el embarazo. Con frecuencia, esto se considera una manera de estimular el desarrollo cognitivo y promover el proceso de aprendizaje. Además, la música dirigida hacia la parte inferior de la panza tal vez podría ayudar a alentar que el bebé corrija la posición. Si bien el éxito de este método no tiene respaldo científico, la reproducción de música no hará ningún daño y puede brindar grandes beneficios al desarrollo.
4. Uso de la temperatura
Coloque un artículo frío en la parte superior de la panza (donde la cabeza del bebé está en la posición de nalgas) y un artículo tibio hacia la parte inferior. La teoría dice que la temperatura ayudará a alentar que el bebé reaccione y mueva la cabeza hacia el calor. Siempre y cuando no se someta a situaciones en extremo incómodas al probar este método, puede hacerlo con la frecuencia que desee.
5. Técnica Webster
La técnica Webster plantea abordar cualquier asimetría que se pueda presentar en la región pélvica o hueso de la cadera. Esto lo hace un quiropráctico registrado y apunta a hacer realineaciones que ayudan a preparar al bebé para un parto óptimo. Siempre consulte con su médico antes de asistir a una atención quiropráctica y, si no se siente cómoda con este método, siga las otras opciones mencionadas.
6. Acupuntura
El uso de la medicina alternativa es otra opción para ayudar al bebé a cambiar la posición de nalgas. Sin embargo, siempre hable con su médico antes de hacer algo como acupuntura o masajes, en especial si está en el tercer trimestre. La moxibustión es una forma alternativa de acupuntura que utiliza una fuente de calor suave llamada vara de artemisa en lugar de agujas. Se aplica la vara en puntos de presión para ayudar a persuadir al bebé para que se ubique correctamente. Nuevamente, no hay evidencia científica con respecto a la artemisa, pero hay algunos estudios que respaldan la acupuntura como una forma efectiva de reposicionar el bebé.
7. Natación
El agua tibia que rodea el cuerpo cuando nada puede hacer que se sienta liviana. También puede afectar la sensación del bebé en la panza y brindarle aliento para corregir la posición. Aunque este método no está comprobado, la natación ofrece muchos beneficios y no causará ningún daño al embarazo.
Qué saber acerca de la versión cefálica externa
La versión cefálica externa (ECV) es otra opción natural para corregir la posición del bebé, pero se debe realizar en el hospital con la ayuda de un profesional médico. Consiste en que el médico aplica presión en el estómago esforzándose para guiar al bebé hacia la posición correcta. Durante el proceso, se utiliza un ultrasonido para confirmar la posición y monitorear la frecuencia cardíaca del bebé. El médico también puede recomendar medicamentos para ayudar a relajar los músculos del útero y aumentar las posibilidades de una reubicación exitosa.
Si el procedimiento de ECV tiene éxito y hay poco riesgo de que el bebé vuelva a la posición de nalgas, es probable que deje el hospital hasta el momento del parto. Esto dependerá de lo cerca que esté de la fecha de parto, de la cantidad de fluido en el saco amniótico, de la posición del bebé y de la placenta y de cuánto pese el bebé.
Información importante acerca del parto de nalgas
Muchos hospitales del país prefieren evitar los partos vaginales si saben que el bebé está en posición de nalgas y no ha roto bolsa aún. Esto se debe a que el parto de nalgas puede aumentar mucho el riesgo de complicaciones y es mejor evitarlo. Su médico podrá decirle la posición del bebé con bastante antelación a la fecha de parto, de modo que hay mucho tiempo para intentar cambiar la posición del bebé de forma natural. Si la posición no cambió para la semana 36 o 37, el médico puede recomendar programar una versión cefálica externa (ECV). Hay algunos casos en que la mujer no debería tener una ECV. Estos son:
- Sangrado vaginal
- Frecuencia cardíaca fetal anormal
- Ruptura prematura de las membranas
- Mellizos o embarazo múltiple
- Una placenta que está en proximidad estrecha al útero
- Bajo nivel de fluido en el saco amniótico
Para las mujeres que tienen un bebé en posición de nalgas y no tienen éxito con la reubicación o no se pueden realizar una ECV, una cesárea es la solución. Puede evitar problemas con el parto de nalgas. Los bebés que nacen en una posición de nalgas tienen mayor riesgo de problemas con el cordón umbilical, que podría resultar en daño cerebral o neurológico. Además, los bebés que nacen de nalgas pueden lesionarse durante el parto.
Por ello, en general, la cesárea es la mejor opción. Sin embargo, se considera un procedimiento quirúrgico, de modo que conlleva riesgos diferentes. Siempre hable con su médico para obtener más información acerca de sus circunstancias singulares y no tema hacer preguntas. De igual forma, debería tener como prioridad realizar todas las consultas prenatales para monitorear el progreso del bebé y descubrir cualquier señal de posición de nalgas desde temprano.
Además de realizar todas las consultas prenatales, tómese el tiempo de prepararse para el arribo del recién nacido y aprovisionarse con todos los artículos esenciales. Byram Healthcare se esfuerza por lograr que el proceso de pedido sea extractor de leche cubierto por su seguro médico sea lo más fácil y sencillo posible. Consulte nuestra selección de extractores de leche y comience a hacer su pedido.