Los cólicos durante la lactancia: cómo actuar

Si bien es natural que el bebé llore, a menudo lo hace para comunicarse. Lloran cuando tienen hambre, están cansados o necesitan un cambio de pañal. Cuando los bebés comienzan a llorar excesivamente sin una razón aparente, se trata del cólico del lactante. Se puede considerar que su bebé tiene cólicos si llora durante más de tres horas al día, la mayoría de los días y esta situación continúa durante al menos un mes. Puede ser frustrante, provocarnos picos de ansiedad y hacernos sentir impotentes, pero no estás sola. Hasta un 40% de los bebés experimentan cólicos en algún momento. Para comprender mejor los cólicos y la lactancia, y saber cómo manejarlos, a continuación mencionamos algunos factores importantes que es conveniente conocer.

Qué factores contribuyen a los cólicos

Algo importante que queremos dejar en claro es que los cólicos no son culpa suya. Es muy angustiante para una madre ver a su bebé afligido, especialmente cuando lo único que quiere es ayudar. Puede hacer todo lo posible para satisfacer sus necesidades y cuando el llanto no se detiene, puede generar mucha angustia emocional. Sin embargo, como mencionamos anteriormente, no es su culpa. Para ayudarla a manejar mejor los cólicos, es importante comprender algunos de los factores que contribuyen a su aparición.  

Reflejo de eyección hiperactivo

La leche materna sale a diferentes velocidades, dependiendo del agarre y la succión de la boca del bebé. Si su bebé comienza a tomar mucha leche rápidamente, también tragará una buena cantidad de aire. También puede comenzar a atragantarse o esforzarse de manera evidente y luego volver a prenderse al pecho. Si ocurre esto, una fase de bajada hiperactiva de leche puede estar contribuyendo a que tenga cólicos cuando su bebé experimenta momentos de frustración o impaciencia durante la alimentación. Para ayudar a evitar este problema, asegúrese de que su bebé tenga un agarre fuerte y pruebe cambiándolo de posición. Si bien es posible que no pueda controlar la intensidad a la que se alimenta, puede facilitar la ingesta con la posición correcta.

Es importante alimentar a su bebé con frecuencia para que no tenga tanta hambre y evitar así que se alimente con intensidad. Cuanto más intensa sea la lactancia de su bebé, más activa se volverá su bajada de leche. Practique la alimentación perceptiva y esté atenta a las señales de hambre particulares de su bebé.

Exceso de leche inicial

Si está amamantando con ambos pechos, su bebé podría estar ingiriendo demasiada leche inicial. Esto también puede suceder si tiene demasiada leche. La leche inicial es la leche líquida que sale del pecho al comienzo de una sesión de lactancia y contiene mayor cantidad de lactosa que la leche final. Si está produciendo demasiada leche, su leche inicial tardará más en pasar. De manera similar, si cambia de pecho en la mitad de una toma, es posible que su bebé solo esté recibiendo leche inicial y no final. Dado que la leche final es más abundante y contiene menos lactosa, puede producirse un desequilibrio que deje a su bebé con hambre e insatisfecho. Notará un desequilibrio si su bebé tiene cólicos, exceso de gases y deposiciones verdes y blandas.

Sensibilidad ambiental

Si nota que el cólico solo ocurre más tarde en el día, puede ser causado por un exceso de estímulos sensoriales. Para su correcto desarrollo, los bebés tienden a prestar más atención a su entorno que a otras personas. A medida que transcurre el día, puede tornarse abrumador y eventualmente provocar cólicos. Intente reducir la cantidad de estímulos externos por la tarde y busque prendas que tengan un efecto calmante sobre la piel. Deje de utilizar la televisión como música de fondo y, en su lugar, ponga música relajante o incluso ruido blanco.

Dieta e irritantes

Cuando observe signos de cólicos que persisten sin importar otros esfuerzos realizados, examine su dieta. Cuando amamanta, su hijo ingiere lo mismo que usted. Dado que su sistema gastrointestinal aún se está desarrollando, los bebés son más sensibles a ciertos alimentos, especialmente a los lácteos. Son difíciles de asimilar para su sistema digestivo y, por lo tanto, pueden causar malestar después de la lactancia. Algunos bebés pueden tener alergia a los lácteos y volverse intolerantes a la lactosa. Si consume muchos productos lácteos, intente eliminarlos de su dieta durante aproximadamente una semana y fíjese si nota alguna diferencia.

La alergia a la lactosa es común en los bebés, pero no es lo único que puede causar problemas. Los bebés tienen alergias al igual que los adultos, y detectarlas en forma temprana puede ayudar a aliviar los cólicos. Comience a eliminar la causa de los cólicos descartando hambre, enfermedades, medicamentos, suplementos y otros alimentos que sospeche que puedan estar causando problemas. Hágalo en forma gradual y registre el nivel de cólicos de su bebé. Si elimina algo y nota una mejora, manténgalo fuera de su dieta durante algunas semanas. Luego, vuelva a incorporarlo y si su bebé vuelve a tener cólicos significa que ha encontrado la causa. Si tiene alguna pregunta sobre cómo eliminar las alergias, consulte a su pediatra.

Si retomó el hábito de fumar después del parto, intente seguir evitándolo hasta que su bebé sea mayor. Los bebés tienen casi el doble de probabilidades de tener cólicos cuando la madre fuma.

Los cólicos también pueden ser causados por reflujo, aftas, estenosis pilórica, estrés empático, temperamento general, el microbioma de su bebé, dolor físico, gases, diarrea, trastornos congénitos, etc. Si su bebé sufre de cólicos y está preocupada, hable con su pediatra. Si bien, en la mayoría de los casos, los cólicos son causados por los factores enumerados anteriormente, es bueno ser precavida.

Consejos sobre cómo manejar y aliviar los cólicos

Si su bebé sufre de cólicos, hay algunos trucos que puede intentar. Comience con las sugerencias anteriores para ralentizar su bajada de leche, crear un equilibrio entre la leche inicial y, finalmente, disminuir la estimulación ambiental e implementar una dieta de eliminación. Si nada de eso funciona, pruebe seguir los siguientes consejos. Solo tenga en cuenta que los cólicos pueden ser inconsolables, así que trate de programar un tiempo con su pareja para trabajar por turnos, pedir ayuda a sus seres queridos y cuidar de usted también. 

Aumentar la frecuencia de la lactancia

La lactancia ofrece una serie de beneficios. Si su bebé comienza a mostrar signos de cólicos, intente amamantarlo. Esto le dará la posibilidad de descartar que se trata de hambre si no se prende, pero si lo hace, proporciona una conexión relajante y cercana que ayuda a fomentar la protección y el amor. También puede reducir cualquier dolor que sienta su bebé y aumentar la somnolencia. Si los cólicos se interponen en el amamantamiento, considere hablar con una asesora de lactancia  para pedirle ayuda.

Asegúrese de que su bebé eructe después de amamantar

El gas atrapado puede causar malestar y provocar síntomas de cólicos, así que asegúrese de hacer eructar a su bebé después de amamantar. Es posible que su bebé responda a una presión ligera sobre el abdomen. Puebe ambas técnicas y fíjese si le brindan alivio.

Consuele a su hijo

Los bebés necesitan ser consolados, independientemente de lo que sientan. Para ayudar a aliviar los cólicos, sostenga a su bebé en brazos, abrácelo y demuéstrele afecto. Responda a su llanto para hacerle saber que está a salvo y trate de alzarlo durante el día.Utilice fulares, bandas o portabebés; lo que le resulte más cómodo. También puede intentar mecer a su bebé, bailar con él en sus brazos o simplemente caminar por su casa mientras lo carga. Salga de la casa para dar una vuelta y brindarle un relajante cambio de aire. Si nunca ha envuelto a su bebé, investigue un poco y pruébelo. Algunos bebés se sienten mucho más relajados cuando están en esta posición más contenida, mientras que otros se ponen inquietos. Fíjese qué le gusta a su bebé y aplíquelo.

Si bien el exceso de estimulación puede aumentar los cólicos, el ruido blanco de fondo puede tener un efecto calmante. Pruébelo usando una aplicación para su teléfono o una máquina de sonido a volumen bajo.

Pida ayuda

Los bebés que experimentan cólicos a menudo lloran continuamente. Puede ser agotador tanto física como emocionalmente, lo que tiende a crear un ciclo que solo empeora con el tiempo. Es bueno pedir ayuda. De hecho, tomarse un descanso y tener algo de tiempo para usted la ayudará a convertirse en mejor madre. Cuidar a un recién nacido sin cólicos es difícil, uno con cólicos puede parecer imposible sin ayuda. Pida ayuda y recuerde nunca jamás sacudir a su bebé por frustración. Su bebé va a llorar, pero el llanto no va a durar para siempre.

Si su bebé tiene cólicos, trate de no culparse. Tarde o temprano, los cólicos desaparecerán; a veces tan rápido como comenzaron. Sea paciente e intente ser optimista. Mientras tanto, asegúrese de tener su extractor de leche cubierto por el seguro  y de usarlo para ayudarla con la lactancia de su bebé con cólicos. Si tiene alguna preguntao está interesada en aprender más consejos excelentes sobre el embarazo, no dude en ponerse en contacto con un representante de Byram Healthcare.