Qué necesita saber sobre la lactancia y la salud mental

Antes de analizar algunos de los posibles efectos de la lactancia en su salud mental, cabe hablar de los beneficios. La lactancia es una excelente manera de preparar a su hijo para un desarrollo saludable en los años venideros. Puede generar un vínculo más sólido, un sistema inmune más fuerte y menos niveles de estrés con el tiempo. Hay varias razones por las cuales debería intentar amamantar antes de pasar a otras alternativas, pero eso no significa que sea absolutamente necesario continuar amamantando todo costo. Como guía adicional, aquí tiene información importante sobre la lactancia y la salud mental. 

El porqué de la insistencia con la lactancia

A menudo, se presenta a la lactancia como la mejor manera de alimentar a un bebé. Si bien la lactancia tiene muchos efectos beneficiosos en el desarrollo, la sociedad suele quedarse con la idea de que es la única forma que una madre tiene de cuidar a su hijo. Esto genera en las madres mucha presión externa por amamantar, incluso cuando no es físicamente posible.

Aunque la intención es buena, la insistencia en torno a amamantar también puede generarle un gran impacto en su salud mental general y sentimientos acerca de este proceso. Independientemente de lo que le diga la gente que la rodea, la lactancia no es algo que deba hacer a costa de su salud mental. Si usted se presiona para seguir adelante con la lactancia y la situación se vuelve más difícil, puede ocasionar consecuencias negativas para usted y su bebé.

Creemos los beneficios de la lactancia son un factor importante a tener en cuenta, pero todas las mamás tienen derecho a elegir cómo alimentar a su bebé. Si por alguna razón decide alimentarlo con fórmula, también está bien. Solo asegúrese de hablarlo con su pediatra para garantizar que su bebé está recibiendo los nutrientes que necesita para crecer. 

Los efectos de la lactancia en la salud mental

Los efectos de la lactancia en el cuerpo y la mente son distintos para cada madre. Incluso, puede variar en los distintos embarazos de una misma madre. Esto hace que la relación entre lactancia y salud mental sea un poco complicada. Con frecuencia, los efectos dependerán de muchos factores, desde su producción de leche y la facilidad con que amamanta, hasta el tipo de apoyo que recibe de su familia y amigos. Analicemos ambos lados de la ecuación.

El impacto positivo de la lactancia en la salud mental

Para muchas madres recientes, la lactancia tiene un efecto muy positivo en la salud mental. Es una excelente oportunidad para fortalecer su vínculo con el recién nacido. Esto, en parte, se debe a que durante la lactancia se libera oxitocina. La oxitocina es un químico que promueve la sensación de calma y puede aliviar los niveles de estrés. También puede aumentar el suministro de leche y facilitar la lactancia, lo que crea un círculo virtuoso. La oxitocina tiende a aumentar el sentimiento de afecto que comparte la nueva madre con su recién nacido.

La lactancia también puede aumentar el nivel de confianza en su capacidad para ser mamá, lo que genera un efecto positivo en su salud mental. Esto suele ser más notorio en las madres primerizas, que, en general, han estado más nerviosas con la transición, pero le puede suceder a cualquier madre con un recién nacido. 

Sentirá cada vez más el efecto positivo de la lactancia sobre su bienestar y salud mental general si:

- Continúa amamantando de manera exclusiva (con sesiones de lactancia complementarias) durante los primeros seis meses al año de vida

- Tiene una producción de leche suficiente

- No tiene dificultades físicas con la prendida del bebé u otras complicaciones de la lactancia

- Tiene una sólida red de contención en el hogar y en el trabajo (si es que usted trabaja) 

Los efectos positivos de la lactancia en la salud mental también pueden disminuir los malestares de su bebé, fortalecer su desarrollo cognitivo y reducir el riesgo de depresión en su vida. 

Efectos secundarios negativos de la lactancia

Lamentablemente, si la lactancia no fluye fácilmente, puede tener el efecto opuesto para su salud mental. Es normal que las madres recientes que tienen complicaciones con la prendida del bebé se frustren, o se sientan incapaces de alimentar a su recién nacido. Aunque parezca un esfuerzo cuesta arriba, hay una serie de cosas que puede hacer para superar las complicaciones en la prendida del bebé. Una de las mejores opciones es trabajar con una asesora de lactancia y probar algunas posiciones nuevas. 

Otras flamantes madres experimentan disforia después de amamantar, también conocido reflejo disfórico de eyección de leche (D-MER). No hay una explicación clara de por qué esto le sucede a algunas mujeres y no a otras, pero algunos médicos creen que se debe a la forma en que reacciona el cuerpo a las hormonas que se liberan durante la lactancia. 

Estos son algunos indicios de que puede estar experimentando D-MER:

- Frustración luego de amamantar
- Un estado general de infelicidad
- Malestar con la lactancia 

Si bien estos sentimientos suelen disiparse rápidamente luego de amamantar, puede generar una sensación general de temor en relación con el acto mismo. Se puede extender hacia otras áreas de la maternidad e incluso causar rechazos. La lactancia a veces también lleva a niveles más altos de depresión en algunas madres, junto con un sentimiento de ansiedad y agobio. Es importante recordar que si usted siente algunas de estas emociones negativas, no significa que sea una mala madre. 

La mejor forma de cuidar a su recién nacido es buscar ayuda con un profesional con licencia, y considerar unirse a un grupo de apoyo para conectar con otras madres que estén atravesando la misma situación. Siendo que una de cada cinco madres sufren algún tipo de trastorno mental relacionado con la maternidad, es seguro que no está sola. 

También tiene que ser proactiva en cuanto a su salud mental, si tiene algún factor de riesgo. Estos son algunos ejemplos: 

- Historial de enfermedad mental o trastornos del estado de ánimo
- Antecedentes familiares de enfermedad mental
- Experiencia de nacimiento traumática
- Antecedentes de trauma
- Síntomas de depresión en el embarazo
- Ausencia de red de contención
- Problemas maritales
- Baja autoestima o dismorfia corporal 
- Problemas financieros
- Complicaciones médicas con el bebé
- Bebés que son más propensos a cólicos o malestares

Los efectos en la salud mental, tanto los positivos como los negativos, tienen que ver con una variedad de cuestiones. Si su idea es alimentar a su bebé con leche materna, pero luego se enfrenta a complicaciones que se lo impiden, esto puede derivar en una batalla interna entre lo que quiere y lo que es posible. Trabajar con una consultora en lactancia la puede ayudar a superar los inconvenientes físicos, pero es posible que necesite fórmula para asegurarse de que su bebé reciba una nutrición adecuada. 

En algunas situaciones, las malformaciones de nacimiento o afecciones congénitas pueden dificultar o imposibilitar la lactancia. Recuerde: lo mejor que puede hacer en cualquiera de esas situaciones es seguir siendo comprensiva, afectuosa y consciente de las necesidades cambiantes de su bebé. Escuche a su médico y nunca se avergüence. Su capacidad de amamantar no la convierte en una buena o mala madre, pero no cuidar su salud mental puede acarrear consecuencias duraderas, tanto para usted como para el vínculo con su bebé y su desarrollo a lo largo de los años. 

Unas palabras sobre la depresión posparto

La depresión posparto es una forma de depresión severa y de larga duración que afecta a las mamás. No debe confundirse con el sentimiento de angustia después de dar a luz conocido como "baby blues". El sentimiento de tristeza o los síntomas relacionados con el "baby blues", por lo general, desaparecen alrededor de una semana después del parto; mientras que los síntomas de la depresión posparto pueden durar largos períodos de tiempo e interferir con su capacidad de cuidar a su bebé. Algunas son: 

- Depresión
- Abstención de los cuidados
- Fuertes altibajos emocionales
- Disminución del interés o el placer en las actividades
- Cambios en los hábitos alimenticios
- Sentimientos de no ser merecedora, vergüenza o culpa
- Sentirse incapaz como madre
- Ataques graves de ansiedad y pánico
- Temor a no ser una buena madre
- Pensar en lastimarse a sí misma o al bebé

Si usted siente cualquiera de estos síntomas de depresión posparto, recurra a un ser querido o un profesional médico. Existen tratamientos que pueden ayudarla a pasar por este momento difícil. 

Elegir entre la lactancia y la alimentación con leche de fórmula

En última instancia, cada decisión que tome durante la crianza repercutirá en su salud mental. Lo más importante que tiene que recordar es que cada persona es diferente, y usted no tiene porqué hacer nada igual a como lo hicieron sus amigos o familiares. Esté abierta a los consejos, pero trate de tomarlos con cautela. Intentar complacer a todos, en especial cuando los consejos o estilos de crianza son distintos a los suyos, perjudicará su salud mental. ¡La forma en que decida alimentar a su hijo no determina si es una buena o una mala madre! También puede desarrollar un vínculo saludable con su bebé y acompañar su desarrollo usando leche de fórmula. 

Si usted elige la lactancia, Byram Healthcare tiene muchos recursos, expertos y productos muy útiles para incorporar durante el proceso. También contamos con una amplia selección de   extractores de leche con seguro médico disponibles para que las nuevas y futuras madres incorporen al momento de amamantar. Esta es una buena forma de compartir la alimentación con su pareja u otros cuidadores, y recuperar un poco de autonomía durante la crianza. Para obtener más información, consulte nuestra guía comparativa de extractores de leche y haga el pedido hoy mismo.